Un policía de 31 años cuyas iniciales son DLL quedó en prisión preventiva en el marco de una investigación por delitos contra la integridad sexual en perjuicio de una compañera de trabajo –también policía– en la ciudad de San Javier.
La medida cautelar fue impuesta por el juez de la Investigación Penal Preparatoria (IPP), Luis Octavio Silva, a raíz del pedido formulado por los fiscales Ezequiel Hernández y Mariela Jiménez en una audiencia llevada a cabo en los tribunales de la ciudad de Santa Fe.
El hombre investigado fue imputado por los fiscales del MPA en octubre del año pasado. Los funcionarios judiciales le atribuyeron la autoría del delito de abuso sexual con acceso carnal calificado (por ser personal perteneciente a una fuerza policial y por ser en ocasión de sus funciones).
Nuevos elementos
En octubre del año pasado, luego de realizar la imputación, los fiscales del MPA solicitaron por primera vez la prisión preventiva del hombre investigado. Sin embargo, no se hizo lugar al pedido, el policía –que estaba detenido– recuperó su libertad y se le impusieron medidas alternativas.
“Ahora solicitamos esta nueva audiencia de prisión preventiva prevista en el artículo 225 del Código Procesal Penal”, explicaron los fiscales. En tal sentido, detallaron que “se peritó la única prenda de la víctima que no había sido lavada y pudimos aportar nuevos elementos que resultaron de fundamental importancia para la investigación”.
Riesgos procesales
Hernández y Jiménez también se refirieron a los riesgos procesales. En cuanto al peligro de fuga sostuvieron que “estamos ante un ilícito cuya pena en expectativa tiene un mínimo de ocho años de prisión, independientemente de si se considera que hubo acceso carnal o que sólo fue un abuso gravemente ultrajante. Por ello es que, sin duda, la pena en expectativa será de cumplimiento efectivo”.
Por otra parte, los fiscales puntualizaron que “también hay riesgos de entorpecimiento de la investigación a raíz de la condición de policía del imputado, la influencia que podría ejercer en los testigos, el miedo que siente la víctima y los escraches en redes sociales que debió soportar luego de sufrir el ilícito”.
Los hechos
“El ilícito que investigamos fue cometido en horas de la madrugada del viernes 27 de septiembre del año pasado en dependencias de la comisaría Primera (Unidad Regional XIV) de la ciudad de San Javier”, informaron los fiscales en la audiencia.
Hernández y Jiménez relataron que “mientras prestaba funciones en esa comisaría, el imputado le dio somníferos a la víctima –una mujer policía que también estaba trabajando en el mismo lugar– y provocó que quedara dormida”. En tal sentido, precisaron que “diluyó somníferos en café sin que la víctima pudiera advertirlo, para luego cometer el ilícito aprovechando que la mujer no podía consentir libremente el acto sexual”.
Oficina de Prensa y Difusión MPA