“150 AÑOS ABRIENDO CAMINOS QUE DEJAN HUELLAS,
ABRIENDO ALAS PARA
VOLAR…”
El camino
transitado a lo largo de estos 150 años ha trazado huellas imborrables en la
memoria y en los corazones de todos aquellos alumnos, docentes y no docentes
que tuvieron la oportunidad de habitar sus aulas y pasillos.
Reconstruyamos el
pasado y el presente, generemos un lugar de encuentro con los recuerdos, las
voces, la algarabía de los niños por el patio, los dibujos y colores vivos de
los murales, la charla apresurada de los maestros al pasar, el resonar de la
campana, los sonidos propios de nuestra escuela…
En el marco de los 150 años de
oficialización de la Nº 435 “Juan Bautista Alberdi”, los alumnos de 6º “A” y
“B” del turno mañana, desde el año pasado, venimos realizando una investigación
sobre la historia de la escuela. Para ello hemos recabado datos de archivos de
la Biblioteca Escolar y material que gentilmente nos ceden ex docentes y ex
alumnos del establecimiento.
Esta investigación también es
difundida en nuestra radio escolar FM “La Gran`D” 94.1.
Agradecemos al Sr Ignacio López, ex
alumno de la “Escuela Grande”, que tan amablemente nos ha
facilitado este espacio para hacer conocer nuestra historia.
Alumnos y docentes de 6to grado.
LA PRIMERA ESCUELA DE SAN JAVIER
Los Misioneros, siguiendo el espíritu
progresista e inminente civilizador que ha caracterizado a la Iglesia Católica
en todos los tiempos y épocas del mundo, tenían siempre como norma inflexible
levantar una escuela junto al templo porque la escuela, entonces, ahora y
siempre, sin necesidad de descuidar sus funciones docentes en el cultivo y
desarrollo de la inteligencia, sabe conservar cuidadosamente la influencia que
la Iglesia ejerce en el espíritu del niño durante los años de formación y
educación religiosa, su trabajo cultural adquiere invariablemente proporciones
gigantescas e insospechadas en beneficio del individuo, del hogar y de la
sociedad.
Por eso el Padre Burges abrió una
escuela para sus indios. ¿Y cómo era?. Ya se lo puede imaginar
el lector: como las iglesias y como la casa de los Misioneros; sus paredes las
formaban seguramente unas estacas de madera clavadas en el suelo sobre las
cuales se habían extendido unos cueros de vacunos sin adobar. Así era la
primera escuela de San Javier en 1752.
En esa escuela de carácter tan
primitivo, impartía el Padre Burges la primera enseñanza a los niños y adultos
mocovíes que nos precedieron en estas tierras legendarias y exuberantes, hasta
que pudo tener ayuda en ésta tarea tan importante de tamaño alcance.
La ayuda eficaz y más rápida de lo
que podía presumir, le llegó con el Padre Paucke.
Imágenes:
Izquierda
Florián Paucke nació en
Silesia el 24 de septiembre de 1719 y murió en Bohemia el 13 de
abril de 1780.
“En el año 1748”, escribe
Paucke, “después de empeñosa presentación de mi pedido, durante once años,
llegó desde Roma el permiso para que yo partiera a Las Indias o sea a América”.
Derecha
La Iglesia
de San Javier, cementerio y patio central de los talleres; detrás la casa de los
Padres y la huerta. (REPRODUCCIÓN DE LA OBRA DEL PADRE JESUITA FLORIÁN
PAUCKE, AÑO 1770).
s de empeñosa presentación de mi
pedido, durante once años, llegó desde Roma el permiso para que yo partiera a
Las Indias o sea a América”.
CONTINUARÁ…