Según el informe “Situación de la Producción Orgánica en la Argentina durante 2019” del Senasa, Santa Fe con sus 6712 colmenas certificadas distribuidas en los diferentes ambientes naturales en las zonas de montes nativos y cuenca del Río Paraná y sus 200 toneladas promedio/anuales es la segunda provincia productora de miel orgánica de Argentina.
Al respecto, el director provincial de Producción Lechera y Apícola, Abel Zenklusen, mencionó que en el marco de la Mesa de Diálogo Provincial del Ministerio de Producción, Ciencia y Tecnología “se decidió la conformación de una ámbito de trabajo específico que aborde las problemáticas y alternativas para llevar adelante un plan de crecimiento sustentable en el tiempo de la apicultura orgánica, no sólo abordando la producción de miel sino también de otros productos de la colmena (cera, propóleos, polen), con la participación de todos los productores de la provincia que actualmente tienen sus colmenas certificadas y aquellos que, por las zonas donde tienen las mismas, pueden transformar su producción actual como miel convencional en orgánica”.
“Se han generado en conjunto con la Secretaría de Comercio Exterior de este Ministerio la posibilidad de acompañar mediante asesor especializado en comex para mejorar las condiciones actuales de exportación de las mieles orgánicas, que en más de un 95% son destinadas a la Unión Europea (Francia, Bélgica, Alemania, entre otros destinos). Otro tema que nos interesa es crecer en el consumo de miel orgánica en el mercado interno: del total de la producción solo el 1% se destina al mercado local”, agregó Zenklusen.
PRODUCTORES
Carlos Micheloud, productor de la Cooperativa Apícola y Granjera San Javier Limitada, destacó sobre las características de sector: “Los ocho productores de miel orgánica certificada que tienen sus colmenas en el área de influencia de islas ven buenas posibilidades de crecimiento si se puede mejorar los accesos a infraestructura adecuada para el manejo de la producción en isla: puertos apícolas, barcazas, truckers o gruas”.
En otro ambiente productivo de miel orgánica, el productor Rodrigo Muchiut de Reconquista, que tiene sus colmenas en la zona de monte nativo en Alejandra, destaca la importancia de “lograr formas asociativas entre los productores orgánicos para generar estrategias de crecimiento conjuntas”, ya que ve posibilidades de expansión en la producción.
En tanto, José Luis Baumann y Claudio Martino, de Sunchales, que tienen sus colmenas en el distrito de Curupaity, manifestaron que el crecimiento tanto productivo como comercial “debe tener fuentes de financiamientos estables y accesibles en el tiempo ya que la producción tiene potencial de crecimiento” y si bien no participan actualmente en forma asociativas, consideran que en la provincia la estructura actual de exportación de cooperativas puede ser una excelente salida al mercado internacional.
En la zona de Tostado, Lucas Pergolesi de la cooperativa de trabajo Los Chañares comentó: “Nuestros montes con sus especies nativas (chañar, algarrobo, molle y garabato) permiten obtener mieles orgánicas de alta calidad, algunas de ellas diferenciadas como mieles orgánicas monoflorales. Nuestras mieles están en condiciones de competir en el mercado internacional por su diferencial de calidad y potencial de crecimiento y vemos un gran futuro en estos 18 años de trabajo en esta producción para nuestra provincia”.
Eduardo Hodel de la Cooperativa COSAR tiene sus colmenas en zona de reserva natural en el centro de la provincia. Sobre el potencial de las mieles orgánicas indicó: “El crecimiento de este tipo de productos está en un buen momento dado el mayor grado de conciencia del consumidor y la búsqueda de productos amigables con el ambiente y de calidad”.
Finalmente, Norberto Gugliota (gerente de la Cooperativa COSAR), comentó que “el desarrollo del mercado externo es posible en los tiempos propios de introducción y conocimiento del producto por los compradores, lo que requiere una inversión tanto en el desarrollo del mercado, como en contar con acceso a herramientas financieras para el negocio”. Asimismo, Gugliota ve el desarrollo del mercado interno de miel fraccionada orgánica como una gran oportunidad de crecer en la comercialización de estos productos, ya que el volumen de miel certificada orgánica que actualmente se comercializa es inexistente.