23 de enero de 2020

ATAQUES DE AVES AFECTAN AL MAÍZ Y EL GIRASOL EN EL CENTRO - NORTE DE LA PROVINCIA


En esa región, las lluvias de la última semana favorecieron el desarrollo de los cultivos, pero las palomas y cotorras amenazan el rinde.

Los ataques de palomas y cotorras afectaron en los últimos días los sembradíos de maíz y girasol del centro y el norte de Santa Fe, y según los productores es una situación que se repite cada vez con mayor incidencia sobre los rendimientos.

De acuerdo con el informe semanal que confeccionan el Ministerio de la Producción provincial y la Bolsa de Comercio de Santa Fe, los productores fueron encontrándose a medida que avanzó la cosecha de girasol con la incidencia de esas aves en los rendimientos.

El trabajo indica que "con el avance de la cosecha se fue teniendo conocimiento real de los ataques de palomas o cotorras y sus consecuencias", en una "situación reiterada campaña tras campaña, pero cada vez con mayor impacto".

Ese cultivo llegó esta semana a un 70% de avance en el proceso de cosecha, con movimiento de máquinas especialmente en el norte y el centro de la provincia.

No hubo variación respecto de semanas anteriores y se mantuvieron los rendimientos promedios, que fluctuaron en mínimos de 12 quintales por hectárea y máximos de 28 quintales, con algunos lotes de hasta 30 quintales, considerados buenos por el sector productivo.

Sobre el maíz, que también sufrió los ataques de esas aves, los cultivares se vieron beneficiados por las lluvias de los últimos días, que aportaron agua útil a los que se encontraban en floración y a los que están en la etapa de llenado de grano y etapas de fructificación.

En cuanto al estado de los lotes, hay un 92% de bueno a muy bueno, con algunos excelentes; un 6% en estado regular y un 2% en estado malo.

La variación en los porcentajes en estos últimos 20 días se originó en los distintos escenarios y realidades ambientales, como temperaturas medias altas a altas, excesos hídricos en posiciones topográficas bajas y encharcamiento o anegamiento.

En cuanto a la soja de segunda, el proceso de siembra presentó un grado de avance del 97%, lo que representa unas 533.500 hectáreas de las 550.000 previstas inicialmente, con un retraso de tres puntos en comparación con similar período de la campaña pasada.

En la semana se incorporaron muy pocos lotes, todos en el área oeste del departamento Nueve de Julio, en tanto en el resto del área de estudio estuvo paralizada la siembra a la espera de precipitaciones que llegaron durante el fin de semana.