18 de enero de 2019

UN EMPLEADO DE ESTACION DE SERVICIO SUSPENDIDO POR COLABORAR CON LA BUSQUEDA DE AGUSTINA


Fue suspendido por colaborar en la búsqueda de Agustina Imvinkelried. Ezequiel es empleado de una estación de servicio ubicada en Ruta 6, recibió una sanción por mostrar las cámaras de seguridad a la policía y a los familiares mientras se buscaba intensamente a la joven.


Ezequiel Schaab es un joven esperancino que trabaja en la estación de servicio Shell ubicada sobre Ruta Provincial Nº 6. Allí se encontraba realizando sus labores, cuando el domingo 13 de enero, un familiar de Agustina Imvinkelried se presentó, desesperado, a pedir ayuda. “Yo entré a los 14:00 horas del domingo y después cae un familiar de Agustina a pedirme las cámaras. En ese momento, yo no sabía la situación ni nada. Me contó lo que pasó, de que el único dato que tenían era que la chica salió del boliche, se acercó a la estación y nadie la vio”, comenzó relatando Ezequiel.
En ese momento me quedé helado. Al contarme eso y la hora que era, lo primero que le digo es que sí, que fuéramos a mirar las cámaras.
“Lo primero que hago es agarrar el celular y llamar a los chicos de la mañana y miro las cámaras en el lapso que me dan de tiempo en que había desparecido. Vemos que no bajó en la estación y una auto que está en duda que tampoco bajó. A los minutos cae la policía y yo accedo (a mostrarle el registro de las cámaras). Es lo mínimo que podía hacer“, aseguró Ezequiel.

El joven relató que después continuó llamando a sus compañeros del turno mañana “por si no habían visto algo” y que también llamó a un camionero que pasó por la estación. “Le pregunté si no había visto nada raro. El que conoce la estación sabe que nosotros estamos todo el tiempo a esa oficina; hasta ahora no tenía llave nunca”, señaló.
El lunes, mientras la ciudad se encontraba absolutamente conmovida tras conocerse el femicidio de Agustina, Ezequiel se presentó a trabajar “y sentía un ambiente raro hasta que pregunto qué había pasado. Me dicen que violé las normas, que no tenía porqué ayudar“. Además, destacó que “nunca había tenido que pedir permiso; a parte cuando los llamas un fin de semana no parecen. Era una situación en que segundos pueden cambiar las cosas”, explicó.

No obstante, los responsables del lugar le informaron que había “violado la entrada a la oficina y accedido al registro fílmico sin permiso. En ese momento quedé helado porque es algo que nosotros hacemos cotidianamente. Me dijeron que tengo pensar en frío… Yo tengo una nena, tengo una hermana de esas edad y uno se pone en la piel de la familia”

“Me dijo que tendría que haber sido frío, que en ese momento no iba a solucionar nada porque a esa hora la chica ya estaba muerta. Ahí me di cuenta la persona con la que estaba tratando que me conteste de esa forma”, lamentó el joven.

El día martes se encontró con el apoderado de la empresa, pero “nadie me dijo nada. Es como si yo hubiera robado, nadie me hablaba. El miércoles me llega un telegrama de suspensión de cinco días sin goce de sueldo y un aviso por posible futuro despido”.

“No es que chocaron en la esquina y me pidieron para ver una patente, era un situación extrema, son segundos en que uno puede ayudar. En lo único que pensé es en dar una mano. Hablé con un abogado para ver si estaba mal o no lo que hice, pero ahora tengo que esperar”, terminó de relatar Ezequiel, visiblemente conmovido por todo lo sucedido.




FUENTE: PLAY TELEVISIÓN