El agua es un elemento esencial del desarrollo
sostenible. Propicia el
bienestar de la población y el crecimiento inclusivo, y tiene un impacto
positivo en la vida humana, al incidir en cuestiones que afectan a la seguridad
alimentaria y energética, a la salud y al medio ambiente.
El Día Mundial del Agua se propuso en la Conferencia de las Naciones Unidas
sobre Medio Ambiente y Desarrollo efectuada
en Río de Janeiro, Brasil del 3 al 14
de junio de 1992. Después de la cual, la Asamblea
General de las Naciones Unidas adoptó el 22 de diciembre de 1992 la resolución
A/RES/47/193 que declaró el 22 de
marzo de cada año como Día Mundial del Agua. Se invitó a participar de actividades
relacionadas con la conservación, el desarrollo y el buen uso de los recursos
hídricos, apelando a la
puesta en práctica de las recomendaciones de la Conferencia de las Naciones
Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo contenidas en el Capítulo 18 (Recursos
de Agua Dulce) de la Agenda 21.
Las cifras llaman la atención por sí
solas, pero hacen falta días como el de hoy, el Día Mundial del Agua, que convoca cada
año Naciones
Unidas, para que
emerjan entre otras que dan cuenta de los grandes problemas mundiales y capten
la atención de los ciudadanos. 2.100
millones de personas en todo el mundo no tienen acceso a un agua potable que haya sido
tratada de forma segura. Y la demanda del verdadero
oro líquido crecerá hasta
un 30% de aquí a 2050, al mismo paso que crecerá la población: 2.000 millones
de personas más pisarán la Tierra en ese tiempo. Y casi dos de cada cinco seres
humanos estarán expuestos a la devastación de las inundaciones.
El daño al medioambiente y el cambio climático originan crisis relacionadas con el agua por todo el
mundo. Las riadas, las sequías y la contaminación de las aguas
empeoran por culpa de la vegetación, el suelo, los ríos y los lagos degradados,
según recoge la convocatoria. La ONU ha puesto las miras en la naturaleza para
afrontar los retos. "La respuesta es la naturaleza"
es el eslogan de la edición de 2018, que apuesta por aprovechar opciones
naturales para superarlos.
La plantación de árboles para reforestar bosques, la
reconexión de los ríos a las llanuras aluviales y la recuperación de los
humedales son algunas de las opciones del 'catálogo natural'. La convocatoria
subraya que esas soluciones ayudan a reequilibrar el ciclo del agua, mitigan
los efectos del cambio climático y mejoran la calidad de la salud humana y de
los recursos naturales necesarios para vivir.
Arranca oficialmente la Década del Agua para el Desarrollo Sostenible
Con la demanda de agua dulce, que se prevé que aumente más del 40 % a mediados de siglo, y el creciente impacto del cambio climático, la escasez de agua constituye una gran preocupación, alertó el Secretario General de la ONU durante el lanzamiento del Decenio en la Asamblea General.
“Para el año 2050, al menos una de cada cuatro personas vivirá en un país donde la falta de agua dulce será crónica o recurrente”, aseguró Antonio Guterres este jueves, Día Mundial del Agua.
El titular de la ONU recalcó que sin una gestión efectiva de los recursos hídricos se corre el riesgo de intensificar las disputas entre las comunidades e incluso aumentar las tensiones entre las naciones.
“Hasta ahora, históricamente, el agua ha demostrado ser un catalizador para la cooperación, no para el conflicto. Pero no podemos dar por sentados ni la paz ni nuestros preciosos y frágiles recursos hídricos”, dijo.
Actualmente, el 40 % de la población mundial se ve afectada por la escasez de agua, el 80 % de las aguas residuales se vierten sin tratamiento al medio ambiente y más del 90 % de los desastres están relacionados con el agua.
Además, más de 2000 millones de personas carecen de acceso a agua potable y más de 4500 millones carecen de servicios de saneamiento adecuados. Muchas de las enfermedades más graves en el mundo en desarrollo están directamente relacionadas con el agua potable insegura, el saneamiento deficiente y las prácticas de higiene insuficientes.
“Quiero aprovechar hoy el lanzamiento de la Década de Acción del Agua para hacer un llamado a nivel internacional para que actúemos en materia de agua, saneamiento e higiene”, expresó Guterres.
El porqué de la Década del Agua
El decenio busca acelerar las iniciativas encaminadas a hacer frente a los desafíos relativos a los recursos hídricos y fue proclamado por la Asamblea General comenzando el 22 de marzo de 2018 y terminando en la misma fecha de 2028.
La década hace énfasis en el desarrollo sostenible y una mejor gestión del agua para lograr los objetivos sociales, económicos y ambientales y ejecutar proyectos relacionados con éstos.
Otra de las metas principales del Decenio es conseguir también que la comunidad internacional impulse la adopción de programas ya existentes, tales como la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030 y el Acuerdo de París de 2015.
La campaña resalta además la importancia de promover el uso eficiente del agua a todos los niveles, teniendo en cuenta el nexo entre el agua, la energía, los alimentos y el medio ambiente.