Bebe mucha agua. Los doctores dicen que cuando una persona tiene sed se debe a que ya está deshidratada. Por esto debes continuar bebiendo agua. No contiene calorías y es beneficiosa para tu salud. Una buena manera de recordar que debes beber agua es cada vez que suene el teléfono, cuando esto suceda bebe otro vaso.
Vístete de acuerdo al tiempo para asegurarte que no vas a transpirar más de lo normal. Si es un día caluroso y húmedo viste con ropa liviana. .
Si vas a realizar algún deporte o actividad extenuante, bebe agua antes de hacerlo. También es importante que bebas durante intervalos de tiempo (cada 20 minutos aproximadamente) cuando estés realizando alguna actividad.
Los indicios más comunes de deshidratación son:
- Sed
- Labios partidos.
- Mareos o fatiga.
- Boca reseca.
- Dolor de cabeza.
- Náuseas.
- Producir poca orina o de color oscura.
Si experimentas alguno de los síntomas indicados anteriormente, descansa en un lugar fresco y bebe bastante agua.
La deshidratación puede suceder debido a alguna dolencia estomacal. Una persona pierde mucho líquido como consecuencia del vómito o diarrea. Cuando estás enfermo, no tienes deseos de comer o beber nada. Pero lo que puedes hacer es beber pequeños sorbos de líquidos a temperatura ambiente. Las paletas de helado también son una buena alternativa.
Consejos
- Bebe harta agua en los días de más viento. Debido a que el viento sopla el agua de tu cuerpo.
- Un buen indicador de si estás bebiendo suficiente agua es tu orina. Tu orina debe tener un color claro.
- Debes orinar al menos 3 veces en el día, si son menos veces entonces deberías beber más líquidos.
- Consume frutas como sandías la cual aumenta el nivel de agua en tu organismo.
- Para saber cuánta cantidad de agua necesitas en el día sigue la “regla de la mitad”. Bebe la mitad de lo que pesas (tiene que ser en onzas, no en libras) Por ejemplo, alguien que pesa 140 libras necesita al menos 70 onzas de agua al día.
- Si encuentras que es difícil beber esa cantidad de agua sola, puedes intentar exprimir jugo de limón, lima o naranja en el agua. Una sopa también cuenta como un líquido hidratante. El jugo de frutas y vegetales, el té y el café también son líquidos que puedes consumir diariamente, pero evita usar azúcar o cafeína.
- Bebe 8 onzas de agua cada 10 o 15 minutos de ejercicio físico, pero si la sesión dura más de 30 minutos hasta 60 minutos, específicamente en un lugar caluroso, necesitarás más líquido y tal vez una pequeña cantidad de sodio (de acuerdo al USA Today)
- Si estás participando en un evento deportivo o en algún tipo de ejercicio intenso el cual dura más de 1 hora, sobre todo si es bajo sol, necesitas beber un mínimo de 10 onzas de agua antes de 15 minutos de comenzar el ejercicio, más lo que se recomienda anteriormente, 8 onzas cada 15 minutos durante la actividad y al menos 8 onzas después del ejercicio.
- Si tu cuerpo tiene un 2% de deshidratación o más, puedes sentirte letárgico y malhumorado. Pero beber una cantidad apropiada de líquidos no solo hidrata tu cuerpo y ayuda a combatir el calor, también limpia tu organismo y elimina las toxinas, transporta nutrientes, lubrica articulaciones, beneficia tu sistema digestivo y te permite eliminar los deshechos de tu cuerpo.
- La deshidratación puede desaparecer solo bebiendo líquidos, pero si la sensación de mareo o fatiga dura varias horas, es probable que necesites ver a un doctor.
