El Rotary Club San Javier y el CUDAIO Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos y tejidos de Santa Fe, llevaron adelante este miércoles 26 de abril, una campaña de donación de sangre en San Javier. La actividad tuvo lugar en el Centro Integrador Comunitario en horas de la mañana. Se trata de un programa del Ministerio de Salud de la Provincia de Santa Fe y dependiente del Centro Único de Donación, Ablación e Implante de Órganos y tejidos y que tiene varios objetivos. Uno de ellos es la promoción de la donación voluntaria y altruista. La sangre extraída se reparte en los tres hospitales que tienen banco de sangre en la capital provincial: Dr. José María Cullen, Dr. Orlando Alassia y Dr. JB iturraspe.
Colectas externas
Durante los primeros seis meses del año más de 2500 personas donaron sangre en distintas localidades de la provincia a partir de colectas externas realizadas por el Programa Provincial de Hemoterapia de esta institución.
Tal como destacó el Coordinador del Programa, Dr. Néstor Manzelli, “hasta el mes de junio hicimos 60 colectas externas de sangre en 34 localidades. Las mismas se realizan independientemente de los servicios regulares de hospitales y sanatorios, lo que resulta muy significativo porque la gente se acerca a partir de un evento y no para responder a una necesidad puntual”.
“El aporte de estas colectas ha impactado notablemente al sistema transfusional, porque a esta remarcable cantidad de donantes se le agrega que muchos de ellos, además, se inscribieron como potenciales donantes de médula ósea. Todo esto nos hace dar cuenta de que cada vez más la gente asume la actividad de la donación como un compromiso social y no sólo como un acto solidario y altruista”, subrayó.
Desde el Programa Provincial se promueve especialmente la conducta de donación voluntaria, responsable, sistemática y habitual dos veces al año. De este modo los donantes que están en condiciones logran aportan sangre y hemoderivados a un sistema transfusional que atiende a miles de pacientes. “Este modelo ha demostrado ser más eficiente y seguro que el tradicional dador ‘de reposición’, que es aquél que decide donar sangre a partir de un llamado de emergencia para un paciente único y determinado”.
Las localidades donde se llevaron a cabo las colectas son: Armstrong, Barrancas, Capitán Bermúdez, Carcarañá, Casilda (en 3 ocasiones), Chañar Ladeado, Colonia Aldao, Díaz, Fray Luis Beltrán, Funes, Humboldt, Ibarlucea, Las Parejas, Las Toscas, Rafaela, Rosario (10 colectas), Salto Grande, San Carlos Centro, San Jerónimo Sud, San José de la Esquina, San Justo, San Lorenzo, Santa Fe (12 colectas), Santo Tomé, Teodelina, Totoras, Venado Tuerto, Villa Constitución, Wheelwright y Zavalla. La actividad se realizó dos veces en Esperanza, Las Rosas, Roldán y Tacural.
Las colectas externas de sangre representan una viva expresión de la Comunidad Donante que se promueve desde CUDAIO. Las 34 localidades que las protagonizaron este medio año muestran además que no hay límites territoriales para este tipo de iniciativa solidaria que tiene como fin establecer un nuevo paradigma en la cultura de la donación de sangre.
Registro Nacional de Donantes (RENADON)
Para garantizar un sistema democrático a nivel nacional el INCUCAI administra el Registro Nacional de Donantes de la República Argentina (ReNaDon), que contiene el listado de todas las personas que expresaron su voluntad de donación y también las listas de los pacientes que necesitan un trasplante de órganos y tejidos.
Las mismas son actualizadas permanentemente con la información provista desde cada Organismo Juridiccional y administradas por el Incucai, de manera de agilizar al máximo el sistema de procuración y trasplante.
Cada persona que manifiesta su expresión de voluntad en torno a la donación de órganos y tejidos, figura en el Registro Nacional de Donantes (Renadon).
El Cudaio, al igual que cada uno de los organismos jurisdiccionales de Ablación e Implante, se ocupa de registrar la expresión de voluntad personal respecto a la donación de órganos, tanto para manifestarse a favor como en oposición a la donación ante el fallecimiento.
Expresar la voluntad y figurar en el Renadon es fundamental, ya que la probabilidad de encontrar compatibilidades entre un órgano o tejido y el paciente aumenta con la cantidad de potenciales donantes inscriptos. Además, este Registro agiliza el proceso de procuración y trasplante, garantizando la preservación de los órganos al acortar los tiempos.
Para figurar en esta Red, es necesario completar un acta de manifestación de voluntad que se encuentra disponible en las oficinas de Cudaio (en Santa Fe y Rosario) y en todas las oficinas jurisdiccionales del Registro Civil de la provincia de Santa Fe.
Donación
Hay enfermedades que sólo pueden afrontarse mediante un trasplante. Órganos, tejidos, células madre, sangre y plasma pueden contribuir a mejorar la calidad de vida y prolongar la supervivencia de las personas mediante técnicas médicas sencillas, como una transfusión, o más complejas, como los trasplantes e implantes.
La posibilidad concreta de realizar un tratamiento médico mediante trasplante de órganos y tejidos se habilita a partir del momento del fallecimiento de una persona donante. El proceso comprende a donantes vivos cuando se trata de células madre y de ciertos órganos, como el riñón y el hígado.
Desde lo ético se sostiene el derecho que posee toda persona a solicitar esta práctica para seguir viviendo o mejorar su calidad de vida. Para ello es necesario verificar que el donante ha aceptado en vida ofrecer sus órganos y tejidos o que sus familiares acepten hacerlo con posterioridad a su fallecimiento.
Es responsabilidad del Estado proteger tanto a donantes como receptores y regular estas acciones para garantizar calidad técnica, gratuidad, y fundamentalmente aplicar el principio de equidad en la distribución.
Para ser donante sólo hay que manifestarlo por escrito mediante un formulario que se encuentra en las oficinas de CUDAIO o en cualquier oficina del Registro Civil de la provincia. En caso de fallecimiento y no tener la manifestación expresa, la Ley considera a la persona como “donante presunta”, corroborando esta última decisión con sus familiares más cercanos.
Un donante vivo es aceptado por la Ley sólo en caso de ser familiar directo del receptor y si se estima que no se le causará grave perjuicio a la salud de la persona donante y existan perspectivas de éxito para conservar la vida o mejorar la salud del receptor. En este caso, se pueden ablacionar y trasplantar únicamente el riñón y un segmento del hígado. La donación de órganos entre personas no relacionadas por parentesco se acepta en situaciones excepcionales, pero sólo con la autorización de la justicia federal.
La donación de células madres, es mucho más sencilla que la de órganos y tejidos porque se asemeja a una donación de sangre. Puede hacerlo toda persona de entre 18 y 55 años de edad, en buen estado de salud, con un peso mínimo de 50 kg. y en condiciones de donar sangre. Está contraindicada la donación en caso que la persona posea antecedentes de enfermedades cardíacas, hepáticas o infectocontagiosas.
La donación de órganos y tejidos es una expresión de voluntad solidaria que toda persona puede ejercer. Cuando una persona manifiesta ser donante está autorizando a que en el momento de su muerte, los órganos y tejidos del cuerpo que puedan ser útiles para salvar o mejorar la calidad de vida de personas que están esperando un trasplante sean utilizados a tal fin. Llegado este momento, los médicos evaluarán en cada caso si puede convertirse en un donante efectivo y cuáles son los órganos y tejidos que podrán ser utilizados para un trasplante. Para ello, tendrá en cuenta la causa del fallecimiento y los resultados de una serie de estudios. Realizados estos estudios y con la ratificación de sus familiares, una persona recién fallecida puede ser ablacionada y sus órganos se pueden trasplantar a quienes se encuentran en lista de espera. El conocimiento y la tecnología médica hacen posibles los trasplantes, pero sólo la decisión solidaria del acto de donar órganos puede transformarlos en realidad.